La ventas de maíz ayudarán al gobierno a cumplir sus obligaciones en 2022
La industria compró hasta el 1° de diciembre 11,2 millones de toneladas, el segundo volumen más alto de la historia.
El escenario de precios favorable para el maíz impulsa su comercialización y, según datos oficiales, la industria compró hasta el 1° de diciembre 11,2 millones de toneladas, el segundo volumen más alto de la historia.
En soja, y pese a los elevados precios, el ritmo de ventas no termina de despegar y es el segundo más bajo de los últimos seis años. El ingreso de divisas por la venta de granos gruesos empezará a fluir a partir de abril y será una rueda de auxilio para las reservas del Banco Central, que podrían no llegar a otoño si no se cierra el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Las cotizaciones del maíz, tanto en las pizarras de Chicago como del Matba-Rofex, impulsan las ventas de los productores. En el mercado norteamericano se paga USD231 la tonelada, mientras que el valor futuro con entrega en abril es de USD196,5 la tonelada.
De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, el volumen de maíz 2021-2022 comercializado hasta el momento solo fue superado en 2019. En la previa de las elecciones presidenciales, y ante los rumores sobre una suba en los derechos de exportación, los productores comercializaron para la misma altura del año 16,7 millones de toneladas.
En paralelo, las declaraciones Juradas de ventas al exterior (DJVE) hasta el 2 de diciembre acumulan 13,3 millones de toneladas, casi un 100% más en relación con el mismo período del año pasado, cuando sumaban 7,3 millones. Las ventas de maíz correspondientes al ciclo 2020-2021 también exhibieron números positivos y cerraron en 39,7 millones de toneladas.
Debido a un clima que jugó a favor del cereal, las proyecciones de siembra aumentaron en los últimos días. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires elevó la estimación en 500.000 hectáreas, que representan unas 4 millones de toneladas adicionales. Por cada millón de toneladas extras que se exporten, la economía sumará USD230 millones y el Gobierno captará USD27 millones en concepto de derechos de exportación.
La soja es el otro cultivo que aporta dólares, sobre todo a partir de la exportación de subproductos como harina y aceite.
En la campaña actual, y con un avance de siembra que se ubica sobre el 60% de la superficie total proyectada, si bien el panorama es similar al maíz en cuanto a precios, la Bolsa de Comercio de Rosario advirtió que el ritmo de ventas de los productores viene en baja.
En Chicago, la oleaginosa se vende en USD465 la toneladas y el futuro con entrega en mayo de Matba-Rofex llegó a los USD318,5 por tonelada, el mayor valor desde el 2013 para este mes del año. Pero, a diferencia del cereal, los productores pisaron el freno y de acuerdo con la Bolsa rosarina, los exportadores solo pudieron comprar 3,4 millones de toneladas de la nueva campaña sojera. El año pasado, esta cifra llegaba a las 4,6 millones de toneladas.
Este escenario empieza a marcar un fuerte contraste con la tendencia que se pudo observar entre mayo y octubre, cuando los productores vendieron granos a buen ritmo. Según la entidad bursátil, las ventas de poroto al complejo agroexportador aumentaron durante ese período 10 millones de toneladas. En esos meses la mejora en los precios internacionales de los granos rompió la inercia de retención, situación que tuvo un impacto positivo en las ventas tanto de poroto como de subproductos.
En la comparativa interanual, las operaciones sumaron 6 millones de toneladas y en un año pasaron a 16 millones.
FFuente: Chacra