Productora agroecológica con gallinas sin estrés

La demanda de productos orgánicos crece sin parar en todo el mundo, lo que estimula a cada vez más agricultores y ganaderos a aplicar las buenas prácticas de salud medioambiental y bienestar animal, dice la productora avícola-ganadera Cynthia Kaplan, de la zona rural de General San Martín.

La alimentación orgánica se ha convertido en una aliada del desarrollo sostenible, dice a Agroperfiles la productora que también es médica veterinaria de profesión.

“Claro que es una inversión, como toda actividad productiva, pero cuando hablamos de cuidar el bienestar animal, producir en forma sana e inocua, siendo sustentable y cuidando el ambiente natural”, señala.

“SOMOS PRODUCTORES AGROECOLÓGICOS”

 “Nosotros somos productores agroecológicos, los que hacemos este tipo de producciones estamos en transición permanente porque tratamos de cambiar nuestros sistemas dependiendo en la menor medida de insumos externos. Es más fácil en escalas chicas, pero es posible en escalas mayores”, sostiene la productora que, junto a Martin Alonso, su esposo, también médico veterinario de profesión, desarrollan la actividad avícola como complemento de la principal actividad ganadera.

Los sistemas sostenibles no utilizan ningún tipo de antibióticos ni parasitarios, explica Cynthia a Agroperfiles.

CONVENIOS CON LA UNIVERSIDAD

“Estamos firmando convenios con UNCAUS para trabajar en conjunto, tenemos la necesidad de evidenciar académicamente esto y queremos que otros productores se puedan sumar a una cadena o estrategia de producción saludable”, comenta.

COMO IMPACTA LA ECONOMIA ACTUAL

La economía actual afecta negativamente y este tipo de producción no es muy sostenible con los nuevos precios. “Todo lo que es dependencia de insumos como el maíz o expeler de soja son inviables los precios para la producción. Es muy difícil animarse a invertir más en este contexto”.

Este tipo de alimento tiene rápida salida, ya que la gente siempre va a consumir alimento y si es sano y sostenible es mejor. “Se espera que siempre se pueda producir de esta manera, ya sea la producción forrajera o pastoril aumenta su rentabilidad cuando utiliza menos insumo externo, lo cual hace también mejor adaptabilidad al clima de sequía o muchas lluvias”.

MENOS ESTRÉS, GALLINAS FELICES

La calidad de vida impacta en el estrés del producto ya sea un huevo o un animal. “No hay vuelta atrás para quienes se acostumbraron a consumir nuestra producción de huevos porque hay nutrientes, mayor concentración de vitaminas, menos colesterol en la yema y todo eso repercute en el sabor y en la calidad del producto. Las gallinas libres de jaula producen huevos de mejor calidad”.

La producción sustentable y orgánica es un tema de mucha importancia en Argentina y en los países subdesarrollados. En tal sentido se lleva a cabo la COP28 que es una cumbre internacional por el clima de distintos lideres globales, organizaciones y activistas de todo el mundo para entablar conversaciones acerca de la crisis climática.

“En estas comisiones internacionales, los países se presentan y acuerdan regulaciones para cuidar el ambiente a futuro, se pactan compromisos y muchas veces no se logra consolidar o se los ve a largo plazo, pero luego esas normativas terminan impactando en países como el nuestro”.

LA ARGENTINA, PAIS FIRMANTE DE LAS COPs

 Argentina es un país firmante a nivel ambiental de convenios internacionales de status constitucional, por lo tanto, las COPS terminan reglamentando acciones que después se regulan en el país y que cualquier productor debe considerar esos acuerdos. “Por ejemplo para el uso de antibióticos en alimentos balanceados, ya hay un acuerdo que a partir del 2030 de forma irreversible va a estar prohibida la utilización de monoxina en alimentación animal”, señaló.

En la actualidad hay grandes investigaciones de que los antibióticos en los alimentos no solo afectan a la salud, sino que impactan directamente en el medio amiente. “Hace unos días perdimos a un gran científico argentino que pudo revelar la presencia de agroquímicos en el agua, en el algodón de toallitas higiénicas, en la orina, evidenciando que productos utilizados a dosis bajas en su momento cuando se crearon no generaban impacto negativo, hoy están en todos lados”.

Argentina usa 9 veces más de agroquímicos que cuando se inició el paquete tecnológico, pero sigue siendo menos contaminante que Brasil. “Hoy hay países del norte que son grandes contaminantes, pero son los que regulan que nadie pueda usar agroquímicos. Ellos generaron impacto en el daño ambiental que afecta a todo el mundo y hoy hacen reglamentaciones que ellos mismos no cumplieron afectando a demás países”, remarcó la productora.

Fuente: Agroperfiles