Se evitó el comercio de productos cárnicos transportados sin cadena de frío

Senasa decomisó 923 kg de carne bovina y menudencias sin documentación sanitaria ni condiciones de inocuidad.

En el marco de los controles que lleva a cabo el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) en los puestos de la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica, en los últimos días se realizaron dos decomisos de productos cárnicos que, entre otras irregularidades, no contaban con refrigeración.

Así, en el Puesto de control Río Colorado, se evitó el ingreso al circuito comercial de 110 kilogramos de carne bovina con hueso que eran llevados sin cadena de frío y de forma oculta, disimulados debajo de camperas y bolsos en el asiento trasero de una camioneta. El vehículo se dirigía desde Bahía Blanca hacia General Conesa, en la provincia de Río Negro.

Por otra parte, en el Puesto ubicado en el km 714 de la Ruta Nacional N° 3, se hizo lo propio con 338 kilogramos de carne bovina con hueso, 355 kilos de carne bovina sin hueso y 120 kilos de menudencias. Esta mercadería fue encontrada en un camión de carga general, que se dirigía desde Buenos Aires hacia Neuquén capital, oculta en la cabina del chofer y en el acoplado.

En ambos casos, estos productos no contaban con las condiciones que se requieren para garantizar su inocuidad para el consumo, ni con la documentación sanitaria. Además, los 448 kilogramos de carne con hueso tienen el ingreso prohibido a la zona libre de fiebre aftosa sin vacunación. Por todo esto, fueron decomisados y desnaturalizados.

Cabe remarcar que consumir carnes que han perdido la cadena de frío puede aumentar el riesgo de sufrir una intoxicación alimentaria, ya que el aumento de temperatura acelera el crecimiento de las bacterias que pueden estar en la superficie de la carne, generando su alteración y deterioro, con lo que pierde su aptitud para el consumo.

Con este tipo de acciones, el Senasa busca proteger la salud de la población, resguardar a quienes producen responsablemente y salvaguardar la sanidad de la producción agropecuaria.

FUENTES: SENASA