El mapa de la sequía
Un informe de la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías actualizó cuáles son las zonas más golpeadas por la ausencia de precipitaciones. El impacto en las principales actividades productivas
El impacto de la sequía sobre el territorio argentino no se detiene. Es más, avanza. Números de enero muestran que el área golpeada por una “severa” falta de agua creció considerablemente en enero, a pesar de que hubo algunas precipitaciones en el período.
Los diferentes informes que vienen publicando desde la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, conformada por diferentes organismos públicos, permiten tomar dimensión del avance que ha registrado la problemática de la falta de lluvias sobre muchas regiones del país y cómo la misma afecta a las principales actividades productivas. Si bien la superficie total afectada por sequía en el país se redujo en 3 millones de hectáreas y alcanza los 172.579.952 hectáreas, como consecuencia de la mejora en las condiciones en Cuyo, la única categoría que muestra descenso en el área afectada es la “sequía leve”.
El relevamiento correspondiente al mes pasado, reflejó que hubo un agravamiento de la situación en la región norte y litoral del país. Al respecto, el área categorizada como “sequía severa” aumentó en 6,5 millones de hectáreas, como consecuencia del agravamiento de la problemática en Chaco, este de Santiago del Estero, Corrientes, Entre Ríos y Buenos Aires. A todo esto, el oeste de la provincia de Córdoba presentó mejoras. En lo que respecta a la superficie con “sequía moderada”, la misma aumentó cerca de 6 millones de hectáreas, principalmente por el incremento en el norte del país.
En términos de humedad en los suelos, los especialistas sostienen que hay una amplia región del país donde los cultivos no logran obtener el agua que requieren para el normal crecimiento. “Si bien hubo recargas, estas fueron variables y no alcanzaron a cubrir en muchas estaciones meteorológicas, los requisitos hídricos de los cultivos. El área afectada es mayor cuando se contempla el consumo de pasturas. Para los distintos cultivos las anomalías negativas más intensas se observan en el centro y sur de Santa Fe y en el norte del país. En el norte de la cordillera patagónica también se registraron valores extremos de humedad en los suelos”, agregaron.
Por otro lado, el mes pasado presentó una leve mejora en las áreas más afectadas lo relacionado a los índices de vegetación, pero además se sostuvo que “un mes más de anomalías negativas, tanto en el centro como en el norte del país. Se destacan los registros bajos en norte de Buenos Aires, centro y sur de Santa Fe, sur y centro de Entre Ríos, Santiago del Estero, Chaco, Corrientes, oeste de Formosa y este de Jujuy y Salta. Se identifican mejoras en el estado de la vegetación en el este y sur de Córdoba, en la provincia de La Pampa y el Oeste de Buenos Aires”.
A todo esto, según la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, la sequía impacta fuertemente en los sistemas ganaderos, que incluye problemas para el abastecimiento de bebida animal, mala condición corporal y merma en forrajes. Además, el informe detalló que hay mortandad animal por aparición de plagas en alfalfa. Por otro lado, los especialistas mencionan a la horticultura también con fuerte impacto y la agricultura presenta fuertes caídas en rendimientos, demoras y disminución del área final sembrada con maíz y soja. Hay que recordar que esta semana la Bolsa de Comercio de Rosario y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvieron a recortar sus estimaciones de cosecha de ambos cultivos de verano.
Zonas
El informe oficial detalló que el impacto de la sequía en el NOA, se concentra en el este de Jujuy, Salta, Santiago del Estero, y este de Tucumán, con afectación en soja y maíz, caña de azúcar y en ganadería. En el NEA, el área más comprometida es Chaco, centro sur de Corrientes, que deriva en muchos inconvenientes para el desarrollo de la ganadería, que presenta pérdida de peso animal, disminución de indices de preñez, y falta de agua para bebida.
En el área central del país, la sequía golpea al centro y norte de Buenos Aires, Entre Ríos, este de Córdoba y Santa Fe, donde los especialistas remarcaron que hay una “intensa afectación” en rendimiento de cultivos y ganadería, cítricos y horticultura. Por el lado de la Patagonia, Santa Cruz y Tierra del Fuego, presentan merma en pastizales e incremento de incendios. Y finalmente en la zona de Cuyo, la problemática está centrada en la Zona cordillerana de Mendoza, Mendoza y San Luis, con afectación en pastizales, niveles de diques bajos, y restricciones en agua de riego.
Fuente: Infobae