En Córdoba se certificó exportación hacia Israel de carne bovina faenada bajo el rito kosher.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) certificó exportaciones desde un frigorífico ubicado en la provincia de Córdoba de más de 27 toneladas de carne bovina faenada bajo el rito religioso kosher con destino a Israel.
La mercadería enviada a Israel – un tradicional comprador de carne argentina producida según la tradición kosher – está compuesta por cortes de carne bovina congelados y comprende: aguja, brazuelo, cogote, marucha, paleta, pecho, tapa de aguja, y tapa de bife ancho, totalizando 27 toneladas que fueron acondicionadas en un contenedor transportado en un camión desde Córdoba a Buenos Aires y de allí, por vía marítima, tras hacer escala en España, arribará a su destino.
Las tareas de verificar el cumplimiento de los requisitos de inocuidad del país de destino y certificar el producto exportado estuvieron a cargo de los médicos veterinarios de la Coordinación de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria del Centro Regional Córdoba del Senasa, Emiliano Bordas, Francisco Ríos y Lucas Herrera Cano.
Estas acciones del Senasa tienen por objetivo resguardar para la Argentina los mercados internacionales a los que llegan los agroproductos nacionales al tiempo que acompaña y fomenta el desarrollo productivo local que genera fuentes de trabajo para la mano de obra del lugar.
La certificación kosher en la alimentación se considera un factor de diferenciación para el acceso a mercados internacionales.
El sistema Kosher hace referencia a los alimentos en sí y a su modo de producción, transformación y preparación siguiendo el conjunto de reglas y leyes religiosas y alimentarias que aparecen recogidas en el Talmud, el libro de la religión judía.
Para que la carne sea considerada kosher no es suficiente que su procedencia sea de un animal permitido por la religión judía sino que, además, debe de ser propiamente inspeccionada, preparada y faenada de acuerdo al sacrificio que en la ley judía se denomina Shejitá.
Fuente: SENASA