La sistematización de los suelos reduce hasta un 70 % las pérdidas
Con el objetivo de conservar los suelos y mejorar la capacidad productiva, en la provincia de Entre Ríos, se lleva adelante un plan de sistematización a escala de cuenca que incluye el diseño y ejecución de terrazas de evacuación y canales colectores. La iniciativa busca reducir la erosión hídrica, mejorar la infraestructura vial rural y fortalecer la sostenibilidad agropecuaria de la región. Este tema se presentó en la jornada regional de suelos que se realizó en Paraná.

Los suelos de la provincia de Entre Ríos presentan como principal limitante la degradación y la susceptibilidad a la erosión hídrica causada por diferentes factores. En respuesta a esta problemática, en la Cuenca del Arroyo de la Ensenada, departamento Diamante, se lleva adelante un proyecto clave cuyo eje es el diseño y construcción de obras de sistematización de suelos a nivel de cuenca en la región del arroyo Gómez.
Jorge Gvozdenovich, referente de conservación de suelos del INTA Entre Ríos y coordinador técnico del proyecto, explicó que “implementar un plan de sistematización a nivel de cuenca tiene alto impacto, ya que logra reducir la pérdida de suelo de 17 a 4,6 toneladas por hectárea por año y evita que cada año se produzca una disminución productiva de 2.219 toneladas de maíz, 482 toneladas de trigo y 381 toneladas de soja”. Además, el investigador indicó que, de esta manera, se logra mejorar la transitabilidad de los caminos y contribuir a la sostenibilidad de las actividades de la microrregión.
De acuerdo con Gvozdenovich, este territorio, que abarca 7679 hectáreas entre las localidades de Libertador San Martín y General Racedo —departamento Diamante—, presenta condiciones naturales propicias para la erosión hídrica. “Suelos con baja capacidad de infiltración, fuertes pendientes y un régimen de lluvias concentrado, sumado a prácticas agrícolas sin conservación, generan una pérdida progresiva de suelo fértil y afectaciones directas a la productividad y a la infraestructura vial rural”, indicó.
“El proyecto busca no solo reducir la erosión, sino integrar la conservación del suelo con el ordenamiento territorial y la mejora de la calidad de vida rural. Es un enfoque integral”, sostuvo Gvozdenovich, y agregó: “Trabajamos en articulación con universidades, municipios, organismos provinciales, cooperativas y productores para lograr soluciones reales y sostenibles en el tiempo”.
La propuesta contempla la sistematización de toda la Cuenca del Arroyo Gómez a través del diseño y ejecución de terrazas de evacuación y canales colectores. “Se elaboraron mapas de suelos, curvas de nivel con equidistancia de 0,5 metros y división en subcuencas, lo que permitió una planificación precisa y adaptada a la topografía del lugar”, puntualizó el experto.

Actualmente, más del 54 % de la cuenca no cuenta con prácticas de sistematización. Según estudios previos, los lotes sin sistematizar pueden perder entre 15 y 20 toneladas de suelo por hectárea por año, superando ampliamente el umbral tolerable de 5 toneladas por hectárea por año. “La sistematización permitirá reducir esas pérdidas en un 73 % y, con ello, mejorar la eficiencia del uso del agua, aumentar la infiltración y proteger la infraestructura vial, clave para la salida de la producción”, señaló Gvozdenovich.
Uno de los aspectos destacados del proyecto es su impacto en la infraestructura rural: al reducir los caudales de escurrimiento desde los campos a los caminos, se evita la saturación de alcantarillas y se disminuyen los daños a la red vial. “Esto mejora la transitabilidad, reduce los costos de mantenimiento y favorece el desarrollo socioeconómico de la región”.
La obra contempla más de 2800 kilómetros de terrazas y 570 kilómetros de canales colectores proyectados para la microrregión. “Es una de las intervenciones más ambiciosas en sistematización de suelos a nivel provincial. La ejecución de las obras comenzó en 2024 y se espera poder contar con la obra terminada para julio del 2025”, indicó.
“Estamos convencidos de que este proyecto marca un antes y un después en la manera de abordar la conservación de suelos en Entre Ríos. Ya no se trata de resolver problemas campo por campo, sino de pensar el manejo del agua a escala de cuenca, con una mirada sistémica y a largo plazo”, destacó el especialista.
El proyecto es impulsado por la Fundación Proiectum, el INTA, la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER y la UBA, junto a la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos, la Dirección de Recursos Naturales, la Dirección Provincial de Vialidad, municipios locales, cooperativas y productores. Su enfoque participativo y territorial busca consolidar una estrategia que combine tecnología, conocimiento local y compromiso institucional.
En el marco del mes de la Conservación Nacional del Suelo y como parte de una agenda conjunta de trabajo interinstitucional de la Región Centro entre Centros Regionales del INTA, gobiernos provinciales, Facultades de Agronomía y Colegios de Ingenieros Agrónomos, se realizó la Jornada Regional de Manejo y Conservación de Suelos de la Región Centro, el 29 de julio, en la ciudad de Paraná.
FUENTE: INTA Informa
