Prevención de enfermedades transmitidas por alimentos y zoonosis

El Senasa organizó actividades en escuelas agrotécnicas de la Provincia donde sus agentes brindaron recomendaciones para evitar contraerlas.

A través de la organización de talleres y charlas informativas para distintos públicos, en la provincia de Entre Ríos, el Senasa intensificó sus acciones de concientización para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos (ETA) y zoonosis (aquellas que pueden transmitirse de los animales a las personas).

En este contexto, un equipo de profesionales del Centro Regional Entre Ríos del Senasa asistió a escuelas agrotécnicas, y ante estudiantes, productores y público en general puso el acento en la importancia de reforzar la prevención de enfermedades que afectan la salud pública. También respondió inquietudes de los participantes sobre las diversas tareas que lleva adelante el organismo sanitario en la provincia mesopotámica.

Las zoonosis constituyen un grupo de enfermedades que pueden transmitirse a las personas por distintas vías: contagio directo con el animal enfermo; a través de vectores como los mosquitos u otros insectos; mediante el consumo de alimentos de origen animal que no cuentan con los controles sanitarios adecuados; o bien por contaminación cruzada, cuando se transfieren bacterias, virus y /o hongos de un alimento a otro por manipular carnes crudas y vegetales y utilizar diversos utensilios de cocina sin lavarlos o desinfectarlos bien.

Una de las jornadas se desarrolló en la EET N° 139 de Producción Agro Industrial de la ciudad de Viale, ante más de 40 alumnos de 5to y 6to año. Durante su exposición de los agentes del Centro Regional Entre Ríos del Senasa, desarrollaron diferentes ejes temáticos, destacando las características generales y signos de que presentan las personas que contraen triquinosis, una enfermedad que además de ser una zoonosis también constituye una ETA.

Esta enfermedad parasitaria puede transmitirse a las personas por el consumo de carne infectada e insuficientemente cocida o de productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres (como jabalíes o pumas) que contengan larvas del parásito Trichinella spp. en sus músculos.

Para su prevención, se consideran factores cruciales como las condiciones de crianza, la alimentación, el manejo y la higiene de los predios para evitar la presencia de roedores. Los alumnos mostraron gran interés, realizando preguntas sobre el ciclo parasitario, los síntomas en las personas y su tratamiento, así como las medidas preventivas en el consumo de alimentos implicados.

Una actividad similar se realizó en General Ramírez, donde participaron productores agropecuarios, personal policial de la Brigada de Delitos Rurales y público en general. Allí se brindaron aspectos sanitarios claves para el control de esta zoonosis de notificación obligatoria, poniendo énfasis en la técnica de digestión artificial (DA), diagnóstico de laboratorio necesario para determinar la presencia o ausencia de larvas en una muestra de carne de cada animal.

¿En qué consiste la prueba?

La prueba de DA simula el proceso de digestión que ocurre en el estómago de algunos animales o del humano. Se toma una muestra del diafragma – comúnmente llamado entraña -, ya que el parásito tiene predilección por este tipo de músculo. Luego, se somete a una solución ácida con pepsina (una enzima digestiva) y calor.

Este proceso disuelve el tejido muscular, liberando cualquier larva de Trichinella spp. que pudieran estar encapsulada en el mismo. Una vez disuelto el tejido, la solución se filtra y se examina bajo un microscopio para buscar la presencia de estas larvas.

Para mayor información, consultar la “Guía rápida sobre triquinosis” con las características principales de la enfermedad.

FUENTE: SENASA