La NASA distinguió a una fotografía argentina como la “imagen astronómica del día”: un cielo nocturno sobre el río Limay

Una fotografía tomada por el argentino Martín Moliné fue seleccionada por la NASA como “Imagen astronómica del día” el pasado 14 de junio. La postal retrata un cielo nocturno sobre el río Limay y logra capturar, en un solo cuadro, la inmensidad del universo y la belleza silvestre de la Patagonia.

Un cielo nocturno sobre el río Limay: la NASA distinguió a esta fotografía argentina como la “imagen astronómica del día”.

“Esta es la foto más compleja que haya sacado. La ideé en 2024, pero el clima no ayudó en aquella ocasión. Este año las nubes parecían frustrar nuevamente los planes, pero por la tarde el clima mejoró. El resultado no pudo ser mejor”, expresó el fotógrafo argentino Martín Moliné a través de sus redes sociales. Y vaya reconocimiento le valió si hasta la NASA la destacó como la “Imagen astronómica del día”.

El río Limay es un río que viene de la cordillera y se alimenta de los deshielos: se trata de uno de los principales afluentes del río Negro y drena una superficie aproximada de 56.000 km2. Enhorabuena, el impacto de esta fotografía también permite dar cuenta de su belleza natural y atractivo turístico en la región.

El río Limay es uno de los cursos de agua más importantes de la Patagonia argentina. Nace en el lago Nahuel Huapi y fluye hacia el noreste, delineando el límite entre las provincias de Neuquén y Río Negro. Su recorrido culmina en la ciudad de Neuquén, donde se une con el río Neuquén para dar origen al río Negro.

Si bien la distinción tuvo lugar el pasado 14 de junio de este año, tal como detallaba Moliné, la toma fue registrada tiempo antes. “Al tomar esta fotografía sentí más frío que nunca, pero la inmensidad del universo y la calidez de presenciar una noche despejada tras una tarde lluviosa y nublada lo compensaron”, amplió el aficionado en esta postal registrada en el Valle Encantado.

Según precisa el artista, el fenómeno presente en la imagen responde a “la lluvia de Acuáridas”, un evento que había prometido una noche especial y cumplió: “además, las nubes y la neblina sobre el río añadieron un toque de misticismo a aquella noche mágica. Regresé al amanecer, con la foto que buscaba y un puma que probablemente nunca entenderá qué ocurría en ese risco”.

Río Limay: un corredor azul en el corazón de la Patagonia

El río Limay es mucho más que un accidente geográfico: es un refugio para quienes buscan naturaleza en estado puro, un imán para pescadores de todo el mundo, y un escenario perfecto para el descanso, la aventura y la contemplación.

Valle Encantado
Valle Encantado

La ubicación exacta de la fotografía es Valle Encantado, un impresionante paraje natural ubicado a orillas del Río Limay, a unos 62 km de San Carlos de Bariloche. Se caracteriza por sus montañas, formaciones rocosas de origen volcánico y la belleza del río Limay, siendo un lugar ideal para actividades al aire libre como trekking, kayak, rafting y escalada.

Un río que se vive desde adentro

En kayak, en canoa o incluso a la deriva con salvavidas y nada más que el cauce como guía, recorrer el Limay es sumergirse —literal y simbólicamente— en otra dimensión del tiempo. Las aguas, cristalinas y calmas en gran parte de su trayecto, invitan a remar sin apuro, a detenerse en alguna playa de arena volcánica, a mirar el vuelo de un cauquén o el reflejo de un coirón al atardecer.

Río Limay
Los paseos en kayak son una de las experiencias más cautivantes para disfrutar el río Limay.

Quienes prefieren actividades más tranquilas también encuentran su lugar: algunas propuestas y experiencias disponibles pueden ser acampar a la vera del río, leer bajo la sombra de un sauce o simplemente escuchar cómo corre el agua puede ser, en sí mismo, una forma de descanso profundo.

Tierra de truchas y rituales de pesca

El Limay es un nombre sagrado para los amantes de la pesca con mosca. En especial en los tramos conocidos como Limay Superior y Limay Medio, donde se dan cita pescadores locales e internacionales detrás del sueño de una trucha marrón trofeo.

En estos sectores, la pesca con devolución es parte de la ética de quienes cuidan el recurso y la experiencia. Más que capturar, se trata de conectar: con el entorno, con el río, con uno mismo.

Caminos paralelos y miradores naturales

Acompañar el curso del Limay en bicicleta o caminata también es una forma de descubrir su geografía: desde el paraje Villa Llanquín, con su balsa comunitaria para cruzar el río, hasta los paredones rocosos del embalse de Alicurá, el paisaje se transforma constantemente.

Patagonia argentina
A la vera del río Limay, una joya natural en plena Patagonia argentina.

Hay formaciones que recuerdan castillos, cañadones que revelan huellas fósiles y cielos que, al atardecer, parecen incendiarse sobre el agua.

Un río para mirar distinto

En tiempos donde el turismo tiende al vértigo y a la sobreoferta, el Limay propone lo contrario: una experiencia de contacto real con el entorno, donde la clave no está en hacer mucho, sino en entregarse a la simpleza de lo que el río ofrece.

FUENTE: INTA Informa