Más allá del frío: descubre cuáles son las plantas que desafían al invierno en Argentina

Junio no es solo frío, estufas encendidas y árboles sin hojas. Para muchas especies de plantas, en Argentina, este es un mes clave para su supervivencia y florecimiento futuro. Te contamos incluso cuáles son las valientes que desafían el frío a puro color.

El mes de junio marca el inicio del invierno en Argentina, y así el clima varía considerablemente de una región a otra en los más de 3690 kilómetros de extensión latitudinal, y un ancho máximo de 1408 kilómetros, que va desde los Andes hasta su parte más oriental, pasando por sierras y llanuras de gran extensión.

El abanico de posibles temperaturas es amplio, en el norte del país con las mañanas frescas (que llegan a ser frías a gélidas a mayor altura), pero máximas templadas que pueden estar en 18-20 °C.

La franja central abarca mañanas frías a muy frías, la temperatura mínima es inferior a los 10 °C y también suele descender por debajo de 0 °C varios días, sobre todo en las zonas alejadas del mar y de los centros urbanos, donde las heladas son protagonistas y afectan a la región rural, las máximas en esta franja son cercanas a los 15 °C.

Por otro lado, en la Patagonia, el ambiente es gélido a frío, ventoso y con las nevadas copiosas como la característica de este mes invernal.

En esta nota vamos a contarte sobre las distintas “protagonistas” de junio. Por un lado, aquellas plantas que gracias a su naturaleza de resiliencia atraviesan el invierno de una manera destacada, ya sea por su capacidad de tolerar y luego recuperarse de las condiciones ambientales adversas propias del invierno (con tan bajas temperaturas, menos lluvias y reiteradas heladas). Y también hablaremos de aquellas plantas que se atreven a mostrar su máximo esplendor y colorido durante la temporada más fría.

Las que resisten al invierno mientras se preparan

Comencemos con las plantas caducifolias, son aquellas que pierden sus hojas, y lo hacen como ahorro de energía y protección contra las heladas. Este proceso, llamado abscisión, les permite conservar energía y adaptarse a épocas de escasez de recursos. Por ejemplo, los árboles frutales como los manzanos, cerezos y durazneros, necesitan de estas horas de frío para dar su fruto en primavera.

Árboles nativos como: palo borracho, sauce criollo, ceibo, etc., pierden totalmente sus hojas en invierno como parte de su ciclo de vida natural, no mueren.

En el grupo de las plantas bulbosas, tanto las que florecen en primavera (tulipanes, narcisos, etc.), como las que lo hacen en verano y otoño (dalias, calas, etc.), necesitan de un periodo invernal clave.

Los bulbos son órgano subterráneo que sirve como provisión de alimento.

En esta estación los bulbos se preparan bajo tierra para el estallido de color futuro. Los bulbos son órganos subterráneos de almacenamiento de nutrientes, los cuales cumplen la función de órgano reservante. Están adaptados a las bajas temperaturas invernales y pueden tolerar perfectamente las heladas. Luego de un período de latencia invernal, los bulbos rebrotan, aportando color a los jardines.

Qué es la dormancia en las plantas

La dormancia es un estado de reposo o letargo en el ciclo de vida de las plantas, donde su crecimiento y actividad metabólica se reducen drásticamente. Es un mecanismo de supervivencia crucial que les permite resistir condiciones ambientales desfavorables, como el frío intenso del invierno o la sequía extrema.

La dormancia es como la “hibernación” de los animales, pero para las plantas. Asegura que las plantas germinen o broten en el momento adecuado.

Durante este período, aunque la planta parezca inactiva, internamente ocurren procesos que la preparan para un crecimiento vigoroso cuando las condiciones vuelvan a ser óptimas. Permite a las plantas resistir el estrés ambiental que de otro modo las dañaría o mataría. Al reducir su actividad, las plantas conservan energía que usarán para el crecimiento futuro.

dormancia planta árbol
La dormancia es un estado de reposo de las plantas. Asegura que estas germinen o broten en el momento adecuado.

La dormancia asegura que las plantas germinen o broten en el momento adecuado, cuando las condiciones son más favorables para su desarrollo. Esto es especialmente importante en especies que necesitan acumular una cierta cantidad de “horas de frío” para romper la dormancia y florecer correctamente.

Las valientes del invierno

Existen plantas que florecen con bellos colores vivos en invierno tales como: pensamientos, violetas, crisantemos, caléndulas, algunos jazmines, etc. Son plantas que se adaptan muy bien a las bajas temperaturas, van desde flores delicadas (violetas), hasta las más rústicas y fáciles de cultivar (caléndulas).

El color no es solo de la primavera, las violetas, azaleas, algunos tipos de jazmines, camelias, pensamientos, etc., florecen en invierno.

Resaltan en medio del gris estacional con colores majestuosos tiñendo jardines, algunos arbustos como camelias (en zonas adecuadas), y las azaleas que nos hacen más llevadero el duro paisaje invernal.

Acciones invernales en el jardín

Hay muchas actividades que realizar durante el invierno en tu jardín, la poda invernal en una de ellas, y muy importante para la salud y el crecimiento de muchas plantas frutales y rosales. Es crucial porque la mayoría de las plantas están en dormancia, minimizando el estrés. Al no tener hojas, es más fácil ver la estructura de la planta, permitiendo eliminar ramas muertas o enfermas, mejorar la circulación del aire y estimular un crecimiento vigoroso y saludable en primavera.

poda invernal
La poda invernal eliminar ramas muertas o enfermas, mejorar la circulación del aire y estimular un crecimiento vigoroso y saludable en primavera.

Otra actividad en tu jardín, huerto o cultivo, es la protección hacia las plantas sensibles de las heladas, se puede optar por mantas térmicas, el traslado de macetas y el mulching, esto último consiste en cubrir la superficie del suelo con una capa de materiales orgánicos esto ayuda a proteger el suelo, retener la humedad y suprimir las malezas.

También en invierno es tiempo de siembra, por ejemplo, varias hortalizas de hoja como: acelga, espinaca y lechuga de invierno, se siembran en junio y son ideales para la huerta en casa. No olvidemos, además que la fertilización es importante durante el invierno, ya que preparar el suelo para la primavera.

FUENTE: METEORED – Por Marina Fernández