Sistema de riego en el Valle Inferior del Rio Chubut.
Opción Rural
Haciendo un paseo por la provincia de Chubut, precisamente en la zona de chacras de Gaiman, consulté a algunos productores sobre la producción en el valle.
Destacaron que el 90 % de las tierras bajo riego del Valle Inferior del Rio Chubut (VIRCH), son destinadas a la ganadería y la producción de forraje, dado que la ganadería bovina ha crecido fuertemente en los últimos diez años.
Teniendo en cuenta que es una zona semiárida cuentan con un sistema de riego que nace desde la Boca Toma ubicada sobre el curso del rio Chubut a pocos kilómetros río abajo del Dique Florentino Ameghino, al oeste de la localidad de 28 de julio, y finaliza en Rawson pasando por Dolavon, Gaiman y Trelew.
Se riegan alrededor de 20.000 ha, cuenta con canales principales, secundarios y terciarios que suman 350 km de longitud.
Esta red de canales es administrada y operada por la Compañía de Riego, que es una entidad pública no estatal, una particularidad de este sistema de riego es la existencia de canales conocidos como comuneros que toman agua de los canales de la red y son responsabilidad de los chacareros, lo que incluye la limpieza, el mantenimiento y las reparaciones.
Estos canales suman cerca de 700 km qué son utilizados por más de 500 grupos de productores, su uso y mantenimiento requiere de un gran esfuerzo de organización y comunicación, estos canales conducen el agua de la red de riego a las chacras dónde se cultivan pasturas para la cría de animales, alfalfa para la confección de reservas forrajeras, hortalizas y frutas.
El inicio de la temporada de riego se da en los últimos días de agosto y finaliza a fines del mes de abril. A diferencia de otros valles del país, en el VIRCH, el sistema de riego no es por turnos, el tomero es el que guía el agua, es quien está en la primera línea de la cadena cuando se larga el agua y en constante diálogo con los regantes. A pesar de que a muchos no les gusta tiene que ser el que exige el cumplimiento del uso racional del agua con el compromiso de crear conciencia sobre el cuidado y que el ahorro del recurso hídrico implica “el respeto hacia el otro que por más que tenga menos hectáreas, también tiene que regar para hacer crecer su producción”.
Existen otros canales que conforman la red de drenaje, que tiene como finalidad eliminar el exceso de agua en el perfil del suelo, esto hace que se evite el deterioro por acumulación de sales, el ascenso de la napa freática y la eventual pérdida de cultivos.
El correcto funcionamiento del sistema de riego es muy importante, dada las condiciones de la zona dónde la posibilidad de producir alimentos depende en su totalidad del río Chubut, que es su única fuente de agua dulce.
Se han realizado estudios de investigadores del CENPAT, (Centro Nacional Patagónico: es un centro de investigación y desarrollo del CONICET, que agrupa a diferentes institutos de la Patagonia Argentina) en conjunto con la Universidad de la Patagonia qué prevé escenarios de escasez para fines de siglo, frente a este panorama consideran que el abordaje del sistema de riego debe desarrollarse en toda su amplitud y dimensiones desde el uso del agua dentro de las chacras y su impacto en los ecosistemas hasta la promoción y participación en espacios de discusión y decisión de políticas públicas.
-“Un detalle más es que existen otros valle bajo riego en la provincia que están atravesando procesos parecidos, deberíamos pensar que estos trabajos podrían ampliarse teniendo en cuenta la importancia de los valles en la economía de la región y del agua como recurso indispensable para la vida”- expresaron.
Por Alejandra Garayeta