Recomendaciones para cuidar a tu caballo en invierno

Cuando llega el frío es importante tener algunos cuidados para proteger a los caballos de las bajas temperaturas del invierno. ¿Cuál es la mejor manera de refugiar, alimentar y montar a tu caballo en invierno?

El cuidado del caballo en esta época del año requiere de una atención especial. Su espacio de descanso, el ejercicio, la alimentación o su salud, por poner varios ejemplos, son aspectos muy a tener en cuenta.
En esta nota compartimos una serie de consejos para cuidar a tu caballo en esta época:

-El refugio para cuidar a tu caballo: Lo ideal es que tu caballo cuente con un refugio con techo. En este sentido, no todos los caballos requieren de la misma atención. Los caballos viejos o que se encuentren enfermos tendrán que estar a mayor resguardo, puesto que están más debilitados ante una helada. Sin embargo, no sucede lo mismo en el caso de los caballos jóvenes y sanos que pueden pasar la noche -incluso una muy fría- con tan sólo una manta.

-Acondicionamiento del establo: Este cuidado exige una serie de pautas de higiene y acondicionamiento. Es necesario, que su lugar de descanso esté siempre limpio, cálido y bien ventilado para evitar la formación de moho y la concentración de bacterias. Esto es esencial ya que en estos meses pueden haber más precipitaciones y eso en cierta medida fomenta la aparición de hongos. Si hace mucho frío, a la hora de ventilar el establo se recomienda poner una manta sobre el caballo para que no se resfríe.

-Hidratación del caballo en invierno: hay que resaltar que siempre debe tener libre acceso a agua templada y sin ráfagas de aire que puedan ensuciarla. Para que el agua disponible sea templada, deberemos de acondicionarla mediante calefactores para que no se congele cuando el frío aprieta.
-Dormir en el exterior: En algunos casos, los caballos no duermen en un box que esté perfectamente acondicionado. Si tu caballo es de los que pasa el invierno en el exterior, entonces hay que asegurarse de que cuenta con un pequeño refugio con techo para protegerse de precipitaciones eventuales.

-Ejercicio del caballo en invierno: Nuestra sensación térmica es muy distinta a la de los caballos. Como ya hemos comentado en otras ocasiones, el caballo es un animal de sangre muy caliente, cuya temperatura media está en los 38-39ºC. Entonces, ¿descenderá mucho su temperatura corporal en invierno? No, hay que recordar que el caballo es un animal tremendamente resistente a las bajas temperaturas.

Es importante que el equino siga haciendo ejercicio. Por eso, es muy recomendable que esté durante el día mucho tiempo al aire libre. De hecho, los expertos recomiendan al menos unas 6 horas semanales de ejercicio intenso si el caballo está en buena forma física. Salir a pasear y a correr aunque haga frío tiene muchos beneficios para el caballo: contribuye a mantener su musculatura en forma, estimula el mantenimiento de una buena temperatura corporal y, lo más importante, le permite respirar aire fresco, previniendo así posibles problemas y enfermedades respiratorias.

-Alimentación en invierno: nos interesa que el caballo cuente con reservas energéticas importantes para mantener su temperatura corporal y sus constantes vitales en pleno funcionamiento. Es menester que se aumente significativamente la cantidad de alimento que se le da al animal (si se puede comenzar a tener en cuenta estas cuestiones unos meses antes de que llegue el frío mejor, para que las reservas energéticas se vayan formando con tiempo suficiente).

Fuente: Equusline