El consumo responsable es un valor Atemporal
La marca de diseño del INTA presentó una nueva colección que ensambla la inclusión social y el diseño en una línea de anteojos de madera. Estos productos artesanales son desarrollados por la Cooperativa Atemporal que agrupa a comunidades del norte de Santa Fe. Desde diciembre, disponibles en la tienda online.
Elegir qué consumimos, dónde y cómo es uno de los actos más revolucionarios. Optar por aquellos productos bienes y servicios que benefician la conservación del ambiente, impulsan la igualdad social, empoderan a sus productores, a un precio justo y sin intermediarios es consumir de un modo responsable.
Es que cada vez son más los consumidores que se interesan por la historia de los productos que consumen y priorizan nuevos valores tales como el saber quién y cómo lo confeccionó. Con esta premisa como eje nacen nuevas propuestas como la de Cooperativa Atemporal de Santa Fe que pone en valor a la artesanía regional con sus anteojos de madera. Desde diciembre, disponibles en la tienda online.
“Con Somos Fibra compartimos la enorme vocación de poner en valor la artesanía regional”, señaló Gerónimo Aguilar, fundador del proyecto Atemporal que trabaja con las comunidades del Paraje San Juan, en articulación con la Agencia de Extensión Rural del INTA, Las Toscas.
Para Aguilar, unirse al INTA implicó “un salto muy grande” que permitió lograr la primera colección en colaboración con una marca. “Es un orgullo que haya sido con una marca del Estado y, particularmente del INTA, quienes desde el principio acompañaron la vinculación de nuestro proyecto Atemporal con la comunidad del Paraje San Juan, donde hoy estamos trabajando”, señaló.
“Queríamos impulsar un cambio social: combinar la artesanía rural con la tecnología”, recordó Aguilar quien reconoció que combinar la inclusión social de Atemporal con el diseño de Somos Fibra “nos abrió la mirada enormemente”.
En este punto, Marcela Duhalde, responsable del área INTA Diseño y directora creativa del proyecto, destacó el trabajo que se hace desde el organismo para “dar respuesta a los grupos asociativos de artesanas y artesanos rurales de las provincias que demandan asistencia técnica en diseño y estrategias de comercialización para mejorar sus ingresos”.
Y subrayó: “incorporar el diseño es una herramienta para agregar valor al producto y para pensar su comercialización desde una tienda online que está abierta al mundo”. Aguilar coincidió con Duhalde y no dudó en agregar que “el aporte de diseño nos garantiza lo que es clave para ingresar al mundo de la moda y el salto más arriesgado se hizo gracias a Somos Fibra”.
Por su parte, Norma Cardozo –artesana del Paraje San Juan– señaló que “es muy lindo creer en el futuro y pensar que tenemos el apoyo de las empresas, las organizaciones y las marcas en nuestro trabajo”.
La nueva colección de anteojos Atemporal, que está disponible para la venta a partir de diciembre, se presenta como una propuesta prometedora. “Con el apoyo del INTA y de INTeA aprendimos sobre la importancia del diseño, ahora podríamos imaginar nuevos productos, imaginar futuras articulaciones de las dos marcas, nuevas historias y experiencias para los usuarios”, aseguró Aguilar.
Paraje San Juan, sinónimo de trabajo en comunidad
Ubicado en el noroeste del Departamento General Obligado, Santa Fe, se encuentra el Paraje Obraje San Juan. Esta región se desarrolló a fines del siglo XIX cuando empresas extranjeras se establecieron en la zona para extraer y exportar un recurso natural del monte chaqueño húmedo: el tanino del Quebracho Colorado.
Para la década del 60, la empresa “La Forestal” se retiró y dejó una crisis laboral, económica y social grave que, además generó migración y una población urbana y rural empobrecida, con limitado acceso al mundo laboral formal.
Sus ex trabajadores fundaron la Cooperativa Atemporal de Santa Fe y, con el acompañamiento de la agencia del INTA en Reconquista, desarrollaron la producción de dos modelos de anteojos de madera exclusivos para Somos FIBRA.
Y, desde 2017, el INTA Las Toscas trabaja con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las familias y promover mejoras en lo laboral y económico de sus integrantes. Del proyecto participa la Subsecretaria de Agricultura Familiar de la Nación y el Programa de Apoyo a Grupos de Pequeños Productores Rurales de centro y norte santafesino del Ministerio Producción de Santa Fe.