En el Litoral, se inició la sexta prueba pastoril de toros Angus para el ciclo 2021/22
Se realizó la primera jura fenotípica de los toros que llegaron al establecimiento Pilar, en la localidad de General Ramírez (Entre Ríos). A campo, los productores ven la calidad de los machos.
e la misma forma que se desarrollan nuevas variedades de cultivo, en la ganadería también la calidad y el potencial de la genética se demuestra a campo.
En la localidad de General Ramírez, a 60 kilómetros de Paraná (Entre Ríos), se dio inicio a la sexta prueba pastoril de la temporada 2021/22.×
En el establecimiento “Pilar”, en diciembre llegaron 55 toros de diferentes cabañas litoraleñas (chicas, medianas y grandes) de la raza Angus, los cuales convivirán, bajo situaciones reales de campo, durante todo el año. Cada cabaña remitió al certamen uno o dos toros para que estos sean recriados y evaluados.
Esta pruebas, que se hacen en otros puntos del país, son pilares de desarrollo y representan la base racial que promueve la Asociación Argentina de Angus.
Por ello, este miércoles, se realizó la primera jura fenotípica de la sexta prueba. Habrá otras instancias durante el año (julio y septiembre), para evaluar diferentes estándares productivos. En la última jura, la de octubre, los toros que aun quedan en el certamen saldrán a la venta.
Julián Pessolani, quien es coordinador de la raza en esta zona, contó algunas los detalles que implican estas pruebas.
“Este certamen busca unificar parámetros de evaluación de la raza y ver el desempeño de los animales en el campo. En esta primera reunión, los animales calificarán en cuatro categorías (1 a 4), por ende, obtienen los primeros puntajes, de acuerdo a lo que determina el jurado de la raza”, explica el coordinador. La jura estará a cargo de Guillermo Gallo.
Entre otros de los aspectos que se irán evaluando a lo largo de la prueba están la ganancia diaria de peso, el engrasamiento (que se mide por medio de ecografías) y también la calidad reproductiva (circunferencia escrotal y calidad seminal).
De esta forma, “el animal que mejor performe a lo largo de las diferentes evaluaciones y considerando estos índices, será el ganador”.
Según Pessolani, al conseguir una unificación de los parámetros de la raza, todas las cabañas quedan en igualdad de condiciones en la competencia.
“Además de ser un encuentro social para los productores, en el que pueden ver a sus toros, también se busca que al imponer una crianza pastoril se determine la calidad de ese toro”, indica el coordinador.
Como parte del encuentro, también se realizó una charla técnica, “Plan Sanitario Básico en Cabañas”, y se llevó a cabo la reunión anual de criadores.
Fuente: Infocampo