Ganadería Intensiva Vs. Ganadería Extensiva

La Ganadería Intensiva consiste en la industrialización de la explotación ganadera. Para ello, el ganado se encuentra estabulado, bajo unas condiciones creadas de forma artificial, con el objetivo de incrementar la producción de carne y otros derivados animales como huevos, leche, lana, etc. en el menor tiempo posible. Para lo anterior se hacen necesarias grandes inversiones en instalaciones, tecnología, mano de obra, etc. para poner en funcionamiento plantas ganaderas de este tipo.

El incremento exponencial de la población en el mundo durante el siglo XX, el aumento del consumo de carne por habitante y la disminución de los costes de explotación, han hecho que esta industria haya prosperado durante muchos años.

Ventajas del modelo – Mayor eficiencia, pues a igual inversión, obtiene una mayor producción con en el menor tiempo posible.
– Mayor flexibilidad, pues se adapta a la demanda del mercado fácilmente.
– Más homogeneidad en la producción, resultando en productos con características iguales.
Algunos inconvenientes
– Elevado consumo energético y agua por kilogramo de alimento obtenido.
– Industria extremadamente contaminante, como consecuencia de la acumulación de enormes masas de deyecciónes que contaminan la atmósfera, suelo y aguas con metales pesados, fármacos, etc.
– Es una industria insostenible, ya que no puede mantenerse este tipo de explotación indefinidamente en el tiempo.
– Gran deshumanización de esta industria, pues los animales pierden su condición, carecen de derechos y se convierten en meros objetos. La Ganadería Extensiva emplea métodos tradicionales de explotación ganadera, en los que se imitan los ecosistemas naturales para un desarrollo más favorable de los animales. Su objetivo, es el de utilizar el territorio de una manera perdurable. Dentro de este tipo de ganadería podríamos añadir el subgrupo Ganadería Sostenible, que además mantiene un nivel de producción sin perjudicar al medio ambiente.

Ventajas del modelo
– Reducido consumo de energías fósiles por kilogramo de alimento obtenido.
– Ayudan a mantener los agroecosistemas y la diversidad.
– Puede ayudar a reducir la erosión en climas áridos o semiáridos.
– Los productos obtenidos de su explotación son de mayor calidad que en la ganadería intensiva.
– Mayor humanidad en el trato a los animales

Algunos inconvenientes
– Tiene menor eficiencia productiva y necesita de mucho más tiempo para finalizar su ciclo de producción.
– No se ajusta tan fácilmente a la demanda de los consumidores.
– Sus productos carecen de homogeneidad

Hoy por hoy, gracias al aumento de la sensibilidad de los consumidores hacia el trato a los animales, la mayor preocupación por nuestra salud y el medio ambiente, y una información más exhaustiva, muchos consumidores han cambiado sus hábitos, pasando a elegir productos más sostenibles y de mayor calidad.

Fuente: Contextoganadero