Loros Barranqueros: preocupante situación en Villarino Sur.
Opción Rural
Las localidades de Villarino Sur se encuentran muy afectadas por la superpoblación de loros barranqueros, una especie sumamente invasiva que trae contaminación auditiva, provoca graves daños a instalaciones eléctricas, fibra óptica, cultivos, y además significa un riesgo sanitario.
Consultada sobre la problemática, la concejal Alejandra Rabanedo, también vecina de Hilario Ascasubi, nos cuenta:
-“En el Concejo Deliberante de Villarino se presentaron varios proyectos, atendiendo a la continua solicitud de los vecinos, a través del cual se solicita al Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires que intervenga en la situación y tome medidas para dar solución a una problemática que afecta y preocupa a todos. Dicho proyecto pasó a Comisión de Producción, Medio Ambiente y Turismo donde se afinaron algunos detalles y se propuso sumar a las instituciones relacionadas al campo (ej. INTA, APROVIS, SENASA, AREA DE SALUD, ETC.) dado que la problemática afecta también a la producción, se sumó también a las cooperativas y las empresas de cable que hayan sufrido daños en sus cableados”.
-“Si bien el problema es en todas las localidades, en Hilario Ascasubi se ve agudizado dado que éstas aves se instalaron en la plaza central y en el predio del ferrocarril, es decir en los sectores más céntricos, generando una gran molestia debido a los fuertes sonidos que emiten y la cantidad de excremento que se ve depositada en las veredas, en los patios, en los parques, sobre los techos, etc.” nos manifestó la concejal. –“La respuesta desde Medio Ambiente fue que se debería realizar un conteo de la población de loros para determinar de qué manera actuar ante esta situación”.
-“La problemática se da en todo Villarino Sur pero en el caso de H. Ascasubi es sumamente preocupante, y si no actuamos se va a intensificar de la misma manera en el resto de las localidades”, expresó.
El sábado 18 se realizó una reunión en la citada localidad a la que asistieron vecinos, concejales, productores, en busca de un camino que dé un resultado positivo y una solución viable a la problemática.
En INTA Hilario Ascasubi se realizó un informe técnico sobre la problemática, al pie de la nota dejamos el link de acceso al mismo y a continuación un resumen.
Bases para la mitigación de conflictos con el loro barranquero (Cyanoliseus patagonus) en el extremo austral bonaerense
Resumen
El loro barranquero es un ave autóctona que está en conflicto con la producción de cereales y oleaginosas. Además, los problemas se agudizaron cuando aumentó la frecuencia de asentamiento de bandadas en sectores urbanos y periurbanos provocando daños a instalaciones eléctricas, fibra óptica, complicaciones sanitarias y contaminación sonora a los habitantes de Villarino y Patagones, y de otras zonas de la región como Bahía Blanca y la costa de la provincia de Rio Negro.
La Región Pampeana bonaerense es uno de los biomas más modificados del país, su reducción está limitando el hábitat nativo del loro barranquero con relación al ecotono monte-espinal. Antes eran considerados plagas de la agricultura, pero actualmente existe un marco de protección que los considera una especie nativa amenazada de extinción.
El manejo del loro barranquero como plaga o como especie comercializable nunca se apoyó en información técnica referida al estado de las poblaciones silvestres o a la intensidad del daño que pudieran ocasionar. En el valle bonaerense del río Colorado (VBRC) se encontró que los cultivos más afectados por aves fueron el girasol y el sorgo. Estos cultivos ofrecen buenas condiciones de alimentación durante los meses de enero hasta abril, cuando escasean otras fuentes alternativas. La alimentación invernal está asegurada por el consumo de granos derramados en la vera de caminos o rutas y el acceso a fuentes de agua dulce.
Los loros producen daños en plantaciones de vid (Vitis vinifera), olivo (Olea europaea), durazno (Prunus persica), pera (Pyrus communis), especies forestales maderables, cultivos de maíz (Zea mays), girasol (Helianthus annuus), trigo (Triticum aestivum) y avena (Avena sativa).
En Hilario Ascasubi se encontró que el uso de cultivares de ciclo corto y la siembra temprana adelantan la cosecha del girasol, disminuyendo así las pérdidas por aves. La adopción del girasol llegó gracias a las tácticas de manejo agronómico como el riego, fertilización fosforada, siembra temprana con alta densidad e híbridos de ciclo corto, protección del cultivo desde llenado de grano a cosecha (45 días antes de la cosecha) y utilización de desecantes químicos. Aplicando adecuadas técnicas agronómicas se puede producir girasol con alta densidad de plantas. Esto disminuye el ataque de los loros y otras aves granívoras y solo la periferia de los cultivos es afectada generando daños mínimos y localizados debajo del umbral económico permitido. Se considera que la percepción del perjuicio por loros suele estar sobredimensionada, y que la mayor parte de los conflictos ocurren bajo prácticas inadecuadas en zonas marginales. La percepción del daño se magnifica en las propiedades más pequeñas. Para estimar el daño en pre-cosecha de girasol, se utilizan métodos estandarizados como “la cruz” o la “plantilla graduada”. Esta práctica permite determinar si resulta conveniente defender el cultivo, ya que a veces, cuando los daños son bajos o tolerables, es preferible no intervenir.
Cabe destacar que el informe data del año 2019, y desde esa fecha a la actualidad la población de loros se ha incrementado notoriamente generando la gran preocupación y malestar que afecta a la comunidad.
LEER INFORME TECNICO COMPLETO ELABORADO POR INTA H. ASCASUBI
Por Alejandra Garayeta
Opción Rural