INTA y CONICET: socios estratégicos para la innovación en el agro

Las máximas autoridades de ambos organismos ponen el foco en fortalecer la investigación científica y transferir el conocimiento al sector productivo. El encuentro por la innovación en el agro se dio en el marco de la celebración por los 10 años de Bioinnovo –la primera empresa de base tecnológica creada entre el INTA y el laboratorio veterinario Vetanco SA–, que se realizó en el stand de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía.

En el marco de La Rural, Juan Cruz Molina Hafford –presidente del INTA– y Daniel Salamone –presidente del Conicet– celebraron la articulación estratégica que significa para el país la vinculación de ambos organismos dedicada a la innovación para el agro. Este diálogo, que tuvo como anfitrión a Marcos Pereda Born –vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA)–, busca proyectar la vinculación público-privada en líneas estratégicas de desarrollo.

El encuentro se realizó en el marco de la celebración de los 10 años de la creación Bioinnovo, una articulación virtuosa público–privada que cuenta con investigadores INTA y Conicet. Esta empresa creada por el laboratorio veterinario internacional Vetanco SA y el INTA es un ejemplo en investigación, diseño y desarrollo de productos veterinarios basados en inmunoglobulinas de yema de huevo de gallinas, vacunas recombinantes y prestación de servicios especializados orientados a la salud animal.

Molina Hafford destacó el vínculo fructífero entre el INTA y Vetanco y subrayó la importancia de la ciencia básica trasladada a procesos tecnológicos que agregan valor, como viene haciendo el INTA hace 67 años. En este punto celebro la articulación público-privada que permite transferir ciencia a las empresas privadas y, además, ponderó la capacidad que tienen el Conicet y el INTA para fortalecer una agenda en común de trabajo en innovación para el agro.

Por su parte, Daniel Salamone señaló que el sector agropecuario es uno de los grandes creadores de divisas para el país. En esta línea, aseguró que trabajan para lograr un nuevo Conicet mucho más orientado a la innovación en beneficio del sector productivo para lo cual se profundiza la articulación e integración con el INTA.

Del encuentro también fueron parte María Beatriz “Pilu” Giraudo –vicepresidente de INTA–, Alberto Baruj –vicepresidente de Asuntos Tecnológicos del Conicet–, Nicolás Bronzovich –director nacional de Agricultura de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca–, Ariel Pereda –director nacional del INTA–, Juan Manuel Bautista, Sergio Melgarejo y Nicolás Carlino –representantes del Consejo Directivo del INTA–, Oscar Taboga –director del Centro de Investigación en Ciencias Veterinarias y Agronómicas de INTA–, Eduardo Zavalía –gerente general de Vetanco–, y Andrés Wigdorovitz –director científico de Bioinnovo y director de INCUINTA– junto a integrantes de la dirección nacional del instituto.

10 años de Bioinnovo

Andrés Wigdorovitz –director científico de Bioinnovo y director de INCUINTA– celebró el décimo aniversario de Bioinnovo y lo consideró “una década de esfuerzo, innovación y logros en el campo de la biotecnología”. Y agregó: “A lo largo de estos diez años, hemos sido testigos del crecimiento y la consolidación de Bioinnovo como un nuevo referente en el sector, gracias al incansable trabajo y dedicación de cada miembro de nuestro equipo”.

En este sentido, especificó: “Nuestros proyectos han no solo contribuido significativamente al avance científico, sino que también han tenido un impacto positivo en el control de las Diarreas de los terneros y en el control del Virus de la Diarrea viral Bovina”.

“Hoy celebramos más que solo un hito cronológico; celebramos una misión compartida, un espíritu de colaboración y una visión que nos guía hacia un futuro aún más prometedor. Agradecemos profundamente el apoyo incondicional de nuestros socios VETANCO SA e INTA, así como el compromiso de nuestros colaboradores y la confianza de nuestros clientes, todos ellos pilares fundamentales que nos han permitido llegar hasta aquí”, subrayó Wigdorovitz.

Por su parte, Eduardo Zavalía –gerente general de Vetanco– afirmó: “Bioinnovo es la demostración de que la consolidación de una empresa público–privada en Argentina es posible cuando se cuenta con las herramientas necesarias y la voluntad de las partes involucradas es firme y clara”, y agregó: “Las sinergias y colaboraciones mediante CVT entre el INTA y Vetanco se ha potencializado, aún más del trabajo en Bioinnovo”.

“Nuestro desafío es seguir invirtiendo en el desarrollo científico innovador con impacto real, sumando nuevos productos, abriendo y consolidando más mercados, incluso aquellos que requieren certificaciones más exigentes para las estructuras productivas, que si bien hoy no aparecen a nuestro alcance confiamos en poder lograrlo”, destacó Zavalía.

Una articulación virtuosa

Esta vinculación público–privada permitió consolidar equipamiento e infraestructura, sinergizar las capacidades, formar equipos de trabajo interdisciplinarios y crecer en su cartera de desarrollos y productos.

Hoy, una década después de investigación y desarrollo Bioinnovo ya ha lanzado dos biológicos únicos en su clase por su diseño e innovación: Bioinnovo IgY DNT, para la prevención de la Diarrea neonatal del Ternero, y Vedevax Block, la primera vacuna direccionada a subunidad contra el Virus de la Diarrea Viral Bovina a nivel mundial.

Vedevax es la primera vacuna recombinante a subunidad en el mundo aprobada contra el Virus de la Diarrea Viral Bovina (VDVB), enfermedad que afecta a una gran parte de los rodeos bovinos. Está elaborada utilizando un enfoque diferente al de las vacunas tradicionales: es una vacuna que combina la glicoproteína E2 del virus con el anticuerpo APCH, con tiene afinidad por el sistema inmune. Este mecanismo aumenta enormemente su eficacia.

La vacuna lleva más de 4 años en el mercado y millones de dosis aplicadas. Quedó demostrado que los anticuerpos generados por Vedevax Block perduran por un período no menor a un año. Su aplicación en tambos y en establecimientos ganaderos tuvo buenos resultados y demostró inmunidad. De hecho, se logró una disminución de la mortalidad de hasta un 33 % y un aumento de la preñez del 10 %.

Por su parte, Bioinnovo IgY DNT para la prevención diarrea neonatal en terneros consiste en un tratamiento a través de una tecnología de obtención de anticuerpos policlonales a partir de la inmunización de gallinas ponedoras con antígenos de interés. Las gallinas son capaces de concentrar los anticuerpos IgY en la yema de sus huevos.

La producción de IgY minimiza el sufrimiento animal ya que la obtención de los anticuerpos no se realiza a partir del suero sanguíneo sino de la yema de huevo de las aves hiperinmunizadas. La cantidad de anticuerpos que pueden producirse utilizando una gallina es comparativamente mucho mayor a la que puede obtenerse utilizando un mamífero. Gracias al desarrollo realizado es posible la producción de importantes toneladas de IgY específicas contra diversos antígenos, lo que posibilita el diseño de productos profilácticos y terapéuticos económicamente rentables.

La diarrea neonatal está entre las principales causas de muerte de terneros y es la responsable del 57 % de los decesos totales. Bioinnovo IgY DNT tiene los anticuerpos que el animal necesita para controlar este síndrome y puede incorporarse fácilmente en la leche al comenzar la lactancia.

FUENTE: INTA Informa