Felix Castillo le cuenta a Opción Rural como fue el rescate de sus caballos
Opción Rural
En esta nota podrás conocer no solo como estos hombres rescataron sus caballos sino también como viven y trabajan en su campo cordillerano.
Allá, donde la cordillera da inicio a sus altos picos nevados. Donde la vida se vuelve muy cruda durante los inviernos, pero al llegar el verano el lugar se transforma en un verdadero paraíso.
Paraje Huaraco Norte, Varvarco, en la provincia de Neuquén.
Ahí viven estos “crianceros”. Gente de trabajo que conoce del sacrificio y la entrega por aquello que aman, del esfuerzo y coraje por defender lo que tienen. Ellos arriesgaron sus vidas por resguardar sus caballos que estaban en la montaña, en el medio de la nieve.
Hablamos con Felix Castillo, uno de los protagonistas de esta historia, quien nos contó sobre la travesía que emprendió con su hermano Alejandro, con su tío Antonio y un amigo, Eugenio Vázquez. Una aventura que nunca olvidarán y seguramente formará parte del folklore popular de la zona y de las anécdotas familiares.
Nos cuenta que todos los años necesitan ir a buscar los animales que, en busca de mejores pastos, terminan alejándose de tal manera que no hay mas alternativa que salir a buscarlos. En esta ocasión les tocó buscar a sus caballos. La diferencia con años anteriores es que las nevadas fueron muy intensas, como hacía años no se veía.
– “Salimos a las 9 de la mañana con los perros -nos cuenta Felix. Con poca ropa para cambiarnos (estaban muy mojados ya que la nieve por momentos les daba al pecho) y anduvimos a caballo hasta donde pudimos. Llegamos a la veranada al medio día. Después tuvimos que continuar caminando. Fuimos haciendo turnos para ir adelante porque el que va primero tiene que ir abriendo huella en la nieve”.
Con una temperatura de 20 grados bajo cero, caminaron 9 km montaña arriba hasta encontrar los animales. Pero la vuelta, si bien estaban contentos por volver con sus caballos, no fue más fácil que la ida.
– “ el momento mas difícil fue cuando volvíamos, que tuvimos que cruzar el arroyo, y ahí se nos complicó bastante, tuvimos que hacer 4 o 5 km caminando por el agua”
– “se nos escarcharon los pies, nos acalambramos, el frío no se soportaba y el viento blanco que nos empujaba continuamente llegaba a los huesos”
– “además teníamos que hacer caminos con un palo y pisando para que los caballos puedan pasar”
– “los caballos en muchos lugares no alcanzaban a tocar la tierra, venían hundiéndose en la nieve”
A pesar del gran esfuerzo que tuvieron que hacer física y mentalmente, sabiendo que el único camino para sobrevivir era continuar, pudieron poner a disposición todo su conocimiento de la zona ya que la nieve cubría totalmente el lugar. Solo alguien que vivió durante años y transitó esas montañas muchas veces podría encontrar el camino a casa. Rescataron 9 de los 11 animales que fueron a buscar, dos potrillos murieron.
Recién a las 23 hs estaban llegando a su casa, a tiempo para que un equipo de rescate no saliera a buscarlos, ante la preocupación lógica de sus familias.
-“No fue nada fácil pero logramos llegar a casa a las 23.00 horas con una noche que caía hielo, nieve y viento… pero con nuestra tropilla”
Felix admite el temor que tuvieron, pero en todo momento vemos que lo que mas le interesa es que la gente de distintos lugares conozca como es la vida en el campo en la zona de Huaraco.
Un poco mas sobre sus vidas…
Felix y Antonio Castillo, están dedicados a una vida de producción en plena cordillera, cuentan con un campo de 1.400 hectáreas que deben recorrer invierno y verano para controlar su ganado.
Se dedican especialmente a la cría de chivas. Tienen 500 animales. Además de unas 20 vacas y una tropilla de 12 caballos con los que realizan las tareas de recorrida del campo. (Esos que tuvieron el valor de rescatar)
Durante el invierno dejan dos caballos “bajo rancho”, que son los que utilizan para salir a recorrer y ver el resto de los animales.
Su actividad predominante es la crianza de chivas, nos cuenta Felix: -“Vendemos chivos por lotes en verano o al regreso de la veranada, en otoño.. y los cuero de vez en cuando se juntan para venderlos”
– “La veranada es el lugar donde se llevan los animales en diciembre por mejores pasajes y allá se tienen hasta abril o mayo. Después de esa fecha se bajan… a esto se llama transhumancia”. (La trashumancia es una actividad singular que tiene lugar entre zonas de clima complementario y que consiste en el desplazamiento estacional a larga distancia de los rebaños de ganado, de forma que aprovechen pasto verde todo el año.)
En cuanto a la alimentación – “a partir de que empieza a nevar se les empieza a dar de comer. Les vamos dando pasto a los caballos y las chivas. Las vacas necesitan mas alimento, maíz partido, forraje, la vaca si no agarra el pasto con la lengua no come, así que hay que mantenerlas”.
– “Compramos en cantidad antes de que comience el invierno, compramos 100 bolsas de forraje, 100 o 200 fardos de pasto”
En cuanto al abastecimiento propio tienen dos lugares a los que pueden ir, en primer lugar y como mas cercano se encuentra Varvarco a 3 km de distancia (pequeña localidad de 585 hab. s/senso 2010) donde pueden proveerse, y a 20 km se encuentra Las Ovejas (localidad de 1.316 hab. s/senso 2010). Localidades que impactan por la belleza de sus paisajes.
Ante las inclemencias del invierno no queda mas alternativa que proveerse, por lo tanto las compras se hacen en grande antes de que el frío se haga sentir. También hay que pensar en la leña para abrigar las noches frías, así que hacen leña en el campo y cuando hay que reforzar se encarga una camionada de leña de pino o de sauce.
– “Para utilizar bien el tiempo, en los momentos donde no se puede salir nos dedicamos a hacer trabajos de soguería (sobar cueros, lonjear, hacer lazos, bozales, cabestros, riendas, etc.) En esos día de viento o lluvia que no podemos andar afuera”.
– “Los animales llevan mucho tiempo sobre todo ahora que además de zorros han llegado pumas y han hecho mucho daño.”
Recorrer su campo significa también atravesar arroyos y cañadones. Significa disfrutar de la belleza de la cordillera en verano pero también sufrir los embates del viento, el frío y la nieve en invierno. En todos lados el campo requiere sacrificio y constancia para ver frutos.
Desde Opción Rural queremos agradecer la predisposición de Félix Castillo para atendernos y contarnos, mas allá del noble gesto de rescatar sus caballos en la nieve, como es la vida de los productores rurales en la zona cordillerana de nuestro país. Y destacar el valor de todos ellos arriesgando sus vidas por mantener con vida a sus equinos.
Opción Rural Por Alejandra Garayeta
Fotos: Felix Castillo